En medio de internas políticas, cuestionamientos futbolísticos y conflictos dirigenciales, una nueva denuncia golpea a Boca Juniors. Una vez más, el foco está puesto sobre Juan Román Riquelme, ídolo y actual presidente del club.
El conflicto tiene origen en el faltante de prendas oficiales del club, un tema que fue noticia semanas atrás. En su momento se culpó a Adidas, proveedor de indumentaria, por no haber cumplido con la entrega. Sin embargo, documentos internos revelaron que los productos sí fueron entregados. Esto desvió las sospechas directamente hacia la conducción del club de La Ribera.
La denuncia fue presentada por Walter Klix, director del Ministerio de Seguridad de la Nación, quien acusó a Riquelme por presunta asociación ilícita. El funcionario nacional difundió la presentación judicial a través de sus redes sociales, apuntando contra la gestión actual de Boca y pidiendo una investigación exhaustiva sobre varias irregularidades.
“Quiero que la Justicia investigue qué está pasando con los abonos y los carnets de socios. Quiero que se investigue qué pasó con las 50 mil prendas Adidas que en teoría desaparecieron”, escribió Klix, sumando un nuevo elemento al creciente malestar en el mundo Boca.
Mientras tanto, desde la dirigencia guardan silencio, y Riquelme vuelve a estar en el ojo de la tormenta. A días de partidos clave y con la institución dividida, la denuncia judicial marca otro capítulo oscuro en la era del ídolo devenido presidente.
Boca desmintió el hurto de camisetas
El pasado 7 de mayo, Walter Krieger, abogado de Boca en la primera causa, declaró en el Canal de Boca: “Adidas como sponsor nos provee indumentaria contractualmente, no sólo nos entrega la ropa para todas las disciplinas, por lo que es matemáticamente imposible que haya un faltante de camisetas”.
