Hoy 22 de abril se celebra el Día Mundial de la Tierra, una fecha clave para reflexionar sobre el impacto que nuestras acciones generan en el planeta. Esta jornada busca crear conciencia ambiental y fomentar prácticas sostenibles. La Tierra enfrenta múltiples amenazas causadas por la actividad humana.
Una de las principales preocupaciones actuales es el calentamiento global. El año 2024 fue el más caluroso desde que se tiene registro. Las emisiones de gases de efecto invernadero provocan que el calor quede atrapado en la atmósfera. Esto acelera el cambio climático y altera los ecosistemas.

La contaminación plástica es otro grave problema ambiental. En 2024 se produjeron más de 400 millones de toneladas de plástico, según datos de la ONU. De todo ese volumen, menos del 10% fue reciclado. El resto contamina océanos, suelos y pone en riesgo la vida silvestre.
La deforestación también genera un daño irreversible. Cada hora desaparecen bosques equivalentes a 300 canchas de fútbol. Si no se frena este ritmo, para 2030 solo quedará el 10% de los espacios naturales. Esto impide absorber dióxido de carbono y agrava el cambio climático.

La Tierra nos da vida y recursos, pero también nos advierte. En este día especial, es vital asumir compromisos reales. Proteger el planeta es proteger nuestro futuro. La responsabilidad es colectiva y el tiempo para actuar es ahora.
¿De dónde surge la celebración del Día de la Tierra?
El origen de esta efeméride se remonta El 22 de abril de 1970 se realizó una protesta liderada por estudiantes y el activista Gayrold Nelson, quien propuso también la fundación de la Agencia de Protección Ambiental (EPA). Dos años más tarde, tuvo lugar la primera conferencia internacional sobre el medio ambiente en Estocolmo, llamada “La Cumbre de la Tierra en Estocolmo”. Décadas después, en 2009, quedó establecido como día oficial por medio de la ONU.