En la dura caída de Boca ante Independiente por los cuartos de final del Torneo Apertura, una de las ausencias más resonantes fue la de Marcos Rojo, referente y capitán del plantel. Más allá de las críticas que suele recibir por parte de la hinchada, el defensor central casi siempre dice presente en los partidos importantes.
La razón de su exclusión del equipo titular no fue física ni táctica, sino una decisión puramente deportiva del cuerpo técnico. Según trascendió, el ex Estudiantes no se presentó a entrenar el sábado previo al partido, lo que motivó que fuera relegado al banco en un duelo trascendental frente al clásico rival de Avellaneda.
Según informó el periodista Tato Aguilera en TyC Sports, la ausencia de Rojo respondió más a una cuestión disciplinaria que al cuadro febril que el club había comunicado en la previa del encuentro. La explicación oficial parece haber buscado suavizar el conflicto, pero puertas adentro, la sanción fue clara.
El defensor, campeón con Boca y mundialista con la Selección Argentina, atraviesa un momento tenso con el público. Sus acciones en la cancha —como las expulsiones frecuentes o reacciones desmedidas— y sus actitudes fuera de ella lo han puesto en el centro de las críticas.
La situación de Rojo abre un nuevo capítulo en un vestuario que necesita reencontrarse con el orden y la regularidad. En tiempos donde Boca.
La declaración de Marcos Rojo que desató al BRONCA de la gente de Boca
“No entiendo qué estaba viendo el referí, pero ya está, lo mismo de siempre. No creo que estemos en deuda con la gente. Seguiremos trabajando, estamos punteros y tenemos que estar tranquilos”, expresó tras la derrota en el último Superclásico.
