José Mujica falleció este martes 13 de mayo a los 89 años, tras una extensa lucha contra un cáncer de esófago que derivó en metástasis hepática. La noticia fue confirmada por el presidente Yamandú Orsi, quien utilizó su cuenta oficial de X para anunciar el deceso del exmandatario uruguayo. Mujica había revelado en abril de 2024 que no se sometería a tratamientos invasivos, y enfrentaba un cuadro de salud muy delicado.
Figura emblemática de la izquierda latinoamericana, Mujica fue guerrillero del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, pasó 14 años en prisión —varios de ellos en aislamiento— y luego se convirtió en una pieza clave de la política democrática. Asumió la presidencia de Uruguay entre 2010 y 2015 como referente del Frente Amplio, tras haber sido ministro y legislador.
Su vida fue un símbolo de rebeldía, austeridad y coherencia. Rechazó vivir en la residencia oficial, donaba gran parte de su salario y habitaba una chacra en las afueras de Montevideo. En 1995, se convirtió en el primer tupamaro en el Congreso. Más adelante, se ganó reconocimiento global como “el presidente más pobre del mundo” y se transformó en un ícono del anticonsumo.
Durante su mandato, impulsó políticas progresistas como la legalización del matrimonio igualitario y la regulación del mercado de marihuana. También aceptó recibir refugiados sirios y se destacó por su discurso centrado en el “sentido común progresista”. En 2020, se retiró de la vida política con un mensaje de paz: “En mi jardín hace décadas que no cultivo el odio. El odio nos destruye”.
¿De qué murió Pepe Mujica?
El exmandatario uruguayo falleció a causa de un cáncer de esófago con metástasis en el hígado. Había sido diagnosticado en 2024 y optó por no realizar tratamientos invasivos debido a sus problemas crónicos de salud. Su estado se fue agravando con el tiempo, y en los últimos días su entorno ya hablaba de un desenlace inminente.
